El festival de fútbol solidario Goles por la Paz puso broche de oro este mediodía a tres jornadas de actividades lúdicas presididas por el fomento de la paz y el sano espíritu deportivo. El acontecimiento, organizado por el CEDIFA (Centro de Estudios, Desarrollo e Investigación del Fútbol Andaluz) y coorganizado por la Fundación Peace Dream y la Fundación Sevilla F.C., fue todo un éxito de participación desde el viernes en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios. Enmarcado dentro del programa de eventos de la 2009 Peace Cup Andalucía, Goles por la Paz albergó, a lo largo del fin de semana, a 1.200 participantes que tomaron partido en tres actividades simultáneas utilizando cinco campos de Fútbol-7. Ocho equipos de inmigrantes disputaron un apasionante torneo, al tiempo que seis conjuntos de deportistas con discapacidades intelectuales y en torno a 80 escuelas de fútbol andaluzas hicieron las delicias del numeroso público asistente con diversas exhibiciones.
Todo ello, en un marco de cordialidad y alegría donde cientos de niños y niñas disfrutaron con mayúsculas, paralelamente, de video consolas, camas elásticas, hinchables y globos aerostáticos. Asimismo, los presentes acudieron a la carpa de recepción para inscribirse en el libro de firmas y hacerse fotos con el trofeo de la Peace Cup.
El pistoletazo de salida se dio el viernes a las 17:00 horas, cuando arrancó la competición de los inmigrantes y tuvieron lugar las primeras exhibiciones. El sábado, entre otros actos, los visitantes pudieron disfrutar de las habilidades de equipos femeninos infantiles y benjamines. En la jornada de ayer, epílogo de una auténtica fiesta humana y deportiva, el torneo de inmigrantes disputó los encuentros decisivos. Así, Montequinto Paraguay se alzó con el tercer puesto tras imponerse a Esperanza de Nigeria, mientras que la gran final también tuvo color guaraní. No en vano, Paraguay venció 3-2 a Marruecos en un choque intenso, noble e igualado. Y es que los marroquíes no dieron su brazo a torcer perdiendo 2-0 y lograron nivelar la balanza hasta que, a poco de la conclusión, los paraguayos se llevaron el gato al agua en un córner y provocaron la explosión de júbilo de su hinchada.
