
Esa misión del Consejo de Derechos Humanos, liderada por el juez sudafricano Richard Goldstone, recomendó, entre otras cosas, que Israel pagara más de once millones de dólares por los daños causados.
Riyad Mansour dijo, en una rueda de prensa en Ginebra, que ese país no puede seguir estando por encima de la ley. La comunidad internacional –indicó– debe asegurar que ese país respete el derecho humanitario, y en caso de que no lo haga, estar preparada para tomar medidas concretas, incluyendo recurrir a la Corte Penal Internacional (CPI).
Por otra parte, Mansour señaló que sería importante convocar una reunión de las partes de la Convención de Ginebra relativa al derecho internacional humanitario, en vista de las violaciones que sigue cometiendo Israel.