
"En 2008, los gobiernos europeos acudieron a reuniones de alto nivel en Nueva York, Ghana y Doha y se les elogió por prometer que acelerarían sus compromisos con los países en vías de desarrollo. Este informe muestra que no están cumpliendo estas promesas y por ello demandamos actuaciones más rápidas que salven vidas en los países pobres. No debemos permitir que empleen la crisis económica como una excusa para incumplir sus compromisos", afirma Mayra Moro, responsable de la Unidad de Relaciones Internacionales de Ayuda en Acción.
El documento demuestra que, a pesar de los promesas para alcanzar el objetivo europeo de destinar el 0,56% del PIB a la ayuda al desarrollo, muchos países no están en ese camino o tienen un gasto inapropiado. España se acerca a este objetivo al destinar el 0,5% a la Ayuda Oficial al Desarrollo. Sin embargo, sólo destina un 0,014% a salud, una cifra que queda lejos del compromiso del 0,1% asumido para el sector salud.
Javier Ramírez, responsable de Incidencia Política de Médicos del Mundo, parte de la red de Acción por la Salud Global en España, ha afirmado que "esta crisis azotará la salud de los pobres en los países en desarrollo, con aumento de muertes, más enfermedad y mayor necesidad de servicios sanitarios. Nuestros gobiernos deben actuar ahora y no distanciarse de las promesas que hicieron".