Un grupo de niños refugiados iraquíes que participan en un proyecto de Save the Children en Líbano, han creado una serie de cortos de animación en los que expresan sus puntos de vista sobre cuestiones como la discriminación, el maltrato en las escuelas y sobre lo que se siente siendo un refugiado en otro país.
Las obras representan un claro ejemplo de cómo un proyecto puede ser a la vez educativo y animar a la participación y se muestra que, involucrando a los niños en este tipo de proyectos se pueden generar mensajes de presión con mucho poder.
El taller por el que se han creado las animaciones forma parte del Proyecto de Apoyo Educativo a los Niños Refugiados Iraquíes en Líbano dirigido por Save the Children Suecia y financiado por la Agencia de Cooperación Internacional de Suecia (SIDA). En los cortos Como protegernos a nosotros mismos frente a la discriminación y Queremos regresar a Iraq son niños y niñas refugiados iraquíes en Líbano los que nos muestran como la violencia está presente de algún u otro modo en las aulas y, sobre todo, los sentimientos que afloran entre las personas que se ven forzadas a vivir como refugiados en otro país distinto al suyo.
Por otro lado, en el corto Paremos la violencia contra los niños, desde Yemen, un grupo de niñas con discapacidad tratan de hacer ver cuáles son las barreras a las que se enfrentan en su vida diaria como consecuencia de su situación física y apelan a las soluciones que pueden ofrecerse.
Las obras representan un claro ejemplo de cómo un proyecto puede ser a la vez educativo y animar a la participación y se muestra que, involucrando a los niños en este tipo de proyectos se pueden generar mensajes de presión con mucho poder.
El taller por el que se han creado las animaciones forma parte del Proyecto de Apoyo Educativo a los Niños Refugiados Iraquíes en Líbano dirigido por Save the Children Suecia y financiado por la Agencia de Cooperación Internacional de Suecia (SIDA). En los cortos Como protegernos a nosotros mismos frente a la discriminación y Queremos regresar a Iraq son niños y niñas refugiados iraquíes en Líbano los que nos muestran como la violencia está presente de algún u otro modo en las aulas y, sobre todo, los sentimientos que afloran entre las personas que se ven forzadas a vivir como refugiados en otro país distinto al suyo.
Por otro lado, en el corto Paremos la violencia contra los niños, desde Yemen, un grupo de niñas con discapacidad tratan de hacer ver cuáles son las barreras a las que se enfrentan en su vida diaria como consecuencia de su situación física y apelan a las soluciones que pueden ofrecerse.